Las Estrellas


¿Qué son las estrellas?

Una estrella es una esfera de plasma (estado de la materia que se produce cuando las elevadas temperaturas provocan que los átomos pierdan electrones) en un estado de equilibrio entre la gravedad que tiende a comprimirla y la presión producida por la energía que se produce en el interior, que tiende a expandirla.

A causa de la atracción gravitatoria, la materia de una estrella tiende a caer hacia el centro y concentrarse allí. Eso hace que aumente su temperatura y presión.

A partir de ciertos límites, esta presión provoca reacciones nucleares que liberan energía, generando un impulso hacia afuera que equilibra la fuerza de la gravedad, con lo que el tamaño del astro se mantiene más o menos estable durante un tiempo.




La vida de las estrellas


Las estrellas nacen en nebulosas, que son nubes de gas compuestas en su mayor parte de Hidrógeno, el elemento más abundante del Universo.

Cuando en una pequeña región de estas nubes, por cualquier razón, la gravedad es ligeramente superior a la que hay a su alrededor, el gas comienza a acumularse en ese punto, dando lugar a las estrellas.


Con mucha frecuencia se engendran varias estrellas que forman estrellas dobles, triples, etc., orbitando alrededor unas de otras o bien forman grupos de estrellas formando un cúmulo abierto que se irá dispersando a lo largo del tiempo por su propia rotación.

El 90% de su vida, las estrellas se encuentran en la fase de “secuencia principal” que es el estado en el que están fusionando hidrógeno.

Su masa determina la vida y la muerte de las mismas: Las estrellas más masivas fusionan el hidrógeno más rápidamente y por tanto viven menos y su muerte se produce de forma violenta dando lugar a una supernova, y las menos masivas son las más longevas y mueren expulsando sus capas exteriores de forma no violenta, dando lugar a una nebulosa planetaria.




Clasificación de Harvard

Las estrellas, como todo cuerpo caliente, emite un espectro continuo y éste depende de su temperatura superficial. Por tanto, el color de una estrella nos informa sobre su temperatura superficial: las estrellas más calientes son azules y las más frías rojas





Por eso los astrofísicos siempre se queman al abrir el grifo de agua fría.



En el Observatorio de la Universidad de Harvard, Pickering y sus mujeres computadoras comenzaron a desarrollar en el año 1890 un arduo trabajo de clasificación estelar. Este catálogo fue ampliado hasta las 359.000 estrellas por Annie Jump Cannon.

En un descomunal esfuerzo para clasificar y analizar los espectros de miles de estrellas, se organizaron y dividieron en 7 tipos espectrales básicos, que fueron designados con las letras O, B, A, F, G, K y M, ordenadas de forma decreciente de temperatura superficial medida en grados Kelvin. 
💁regla nemotécnica: Otros Buenos Astrónomos Fueron Galileo Kepler y Messier


Posteriormente, se consideró subdividir cada tipo espectral en pasos intermedios del 0 al 9, donde el 0 se utiliza para las estrellas más calientes y el 9 para las más frías. Se permiten números fraccionarios.




Descargar póster aquí:  Las calculadoras de Harvard